Frances Scribner

Lista de hermanas fallecidas

Fallecida el 30/08/2010

HERMANA FRANCES SCRIBNER
Mayo 23 del 1920 - 30 de Agosto de 2010

Frances Scribner nació en New Hampshire Berlín el 23 de Mayo de 1920, hija de Rose Brisson y Leroy Scribner. Ella entró a las Hermanas Misioneras de la Sociedad de María el 2 de Agosto 1941 y profesó en Bedford, Massachusetts el 15 de Agosto 1944.

Poco después de su profesión Fran (conocida como Hna María Benjamín) sufrió una fuerte gripe con colitis y nerviosismo seguido de síntomas ortopédicos en hombro y brazo. Debido a las lesiones del disco entre las vértebras, el dolor de espalda, llegó a ser crónico y la ansiedad la afligió más y más. Fran se dio cuenta bien rápido que tenía que llevar la cruz del sufrimiento durante toda su vida, así que aprendió a esforzarce para superar el dolor y sumergirse en el trabajo.

Después de ejercer varios servicios en comunidad, cocina, costura y música en Bedford y en Framingham, fue enviada a Hawaii en septiembre del 1953 donde ella sirvió como Superiora local de la comunidad SMSM, primero en la parroquia Estrella del Mar en Honolulu, y después en el Seminario de San Esteban en Kaneohe.

En 1960 Fran fue enviada de Hawaii a Framinghan por razones de salud, fue tan traumático el cambio que cayó en depresión. Fran sufría una gran tensión emocional y un estrés físico y escribió todo esto a la Madre Marie Cyr. Ella no sabía que podría pasar con ella. Necesitaba salir de Hawaii pero no podía soportar el fracaso. ¿Qué significaba todo esto frente a su gran deseo de ser misionera? Ella misma no sabía lo que quería, solamente estar consciente de todo esto y poner fin a los problemas y al dolor. Los años siguientes, se dio generosamente a varios servicios de la comunidad mientras comenzaba una terapia psicologica. Fue nombrada a Jamaica por un breve tiempo en 1965, pero regresó y empezó a estudiar en el colegio de la Asunción en 1966 y se graduó en 1970.
En 1973, Fran pidió un año fuera de la comunidad para discernir y reflexionar sobre su vocación. Al final de este mismo año pidió ingresar otra vez a la Comunidad, echaba de menos la comunidad y no pudo vivir su vocación Marista, sola: Ella amaba mucho su vocación Marista.

En 1977, Fran hizo un largo tiempo de renovación espiritual como SMSM en Coogie Beach, Australia. Esta renovación, con su Maestría en Psicología y su increíble sanación psicológica le dieron un nuevo impulso de vida. Fran empezó una práctica de asesoramiento a tiempo completo en Framinghamy continuó hasta terminar con su último cliente cuando tenía ya 90 años.
La historia de Fran fue la de un sanador herido que busca por sí misma la causa de la angustia emocional y la experiencia que le atormentaba su cuerpo de muchas maneras. Fran fue a menudo no comprendida y herida, como sucede a veces con aquellos que viven semejantes luchas interiores, hasta que finalmente reciben la sanación del cuerpo y de la mente. Su cruz, oscuridad y agonía encontraron consolación en la de Jesús y de María. Ella fue capaz de utilizar sus sufrimientos para tocar los sufrimientos en los demás y ser como una luz guiándoles fuera de la oscuridad. Su misión sería Framingham y especialmente acompañando el crecimiento de Comunidades Laicas Maristas.

Fran escribió en 2004; “He acompañado a mucha gente en asesoramiento durante 28 años, y lo he amado cada minuto y quizas he aprendido más de mis clientes que en el colegio. Han sido recompensados estos años donde el amor de Dios, su misericordia y su perdón fueron bien disponibles, donde los clientes han experimentado a un Dios amante en sus vidas. Con la ayuda y la dirección de Dios (El hace el trabajo, yo solo soy un instrumento), creo que mucho bien se ha cumplido haciendo presente su Reino”.

Gracias por ser un faro de luz, ser humano frágil con una gran capacidad para ser fuerte. Recordaremos una mujer cariñosa, con una sonrisa siempre lista, un oído que escucha y una voluntad de acero. Le pedimos de rezar por nosotros y sonreír en nosotros. Tomemos esperanza de su vida valiente y de confianza en el amor sanador de Dios.

Hna Judith Sheridan,smsm
Provincial