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Marie Astrid Vanhalst

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Fallecida el 31/05/2010

Hna M. Astrid (Maria VANHALST) nació en Bélgica el 30 de Abril de 1925, en medio de una familia muy cristiana y que más tarde migró hacia Francia. Ella misma se nacionalizó como ciudadana francesa en 1982.

Ingresó al Postulantado en 1951 en Sainte Foy-lés-Lyon e hizo su profesión el 9 de Marzo de 1954. Después de un tiempo en L´Hôtel-Dieu en Lyon, ella dejó Francia para Nueva Caledonia y trabajó en la Clinic Magnin en Nouméa por mucho tiempo. Hasta 1996, siempre con sonrisa y disponibilidad, sirvió en la misión en diferentes quehaceres:
-como maestra en Koné, Bourail y Touaourou
-como encargada en el Hogar de Nuestra Señora de las Misiones en Nouméa.

En 1968, regresó a Francia para sus vacaciones y formación permanente. Completó su estadía en Europa con la Renovación o Secundo Noviciado en Lyon en 1970.
En su regresó a Nueva Caledonia, fue superiora de la Casa de Hospitalidad y la apertura del Internado para las jóvenes que llegan al centro para trabajar en Vallée des Colons.
En 1973, fue nombrada a la comunidad de Pierre Lanquette, viviendo en un apartamento por medio de una multitud de trabajadores de minas donde ella hizo catequesis y trabajo social, visitando las familias.
A su regreso a Francia en 1976, hizo estudios de catequesis en Paris y también en CLER para trabajar con las familias. Allí descubrió el método Billings y cuando regresó a Nueva Caledonia empezó a enseñar a las parejas cristianas este método. En conexión con la enseñanza de este método, fue a Melbourne, Australia en 1978 y después en Tonga en 1981. Hizo también cursos pastorales para trabajar con las familias que fue dado en Nueva Caledonia por Monseñor Xavier Lacroix de la Universidad Católica de Lyons.

En 1977, fue superiora de la nueva comunidad de Rivière Salée donde se dio con todo su ser y su corazón cuesta lo que cuesta en la catequesis y en la pastoral con las familias.
En 1983, fue nombrada como ecónoma para Nueva Caledonia.
En 1987, fue miembro para el Capitulo Provincial en Oceania.
En 1993, fue designada a la comunidad de Koumac haciendo siempre la pastoral de las familias.
En 1995, no se repuso después de una fractura en la pierna. Entonces fue acogida en la comunidad de las mayores en Saint Louis y de allí regresó a Francia en 1996.

Después de un largo tiempo de descanso y de convalecencia fue nombrada a la comunidad de la Fare-les-Oliviers, en Provincia, ayudó en la parroquia hasta que le alcanza la terrible enfermedad de Alzheimer.

En Mayo de 2008, vino a la comunidad de “41 chemin du Signal”. Su enfermedad no le permitió quedarse por mucho tiempo. Entonces ingresó por un largo tiempo al Hospital “Pierre Garraud” donde falleció el 31 de Mayo 2010, día de la Visitación de la Virgen María. Muchas hermanas la han visitado en la noche que siguió su muerte pero nadie esperaba que su final fue tan rápido y pronto.

De toda manera, Hna M. Astrid dejó en la memoria de todas, una que es acogedora, siempre disponible y muy sociable con todos. Le gustó el contacto con las familias y no tenía problema con su tiempo. Sabia como escuchar atentamente y ayudaba a muchas parejas. Era una mujer de oración y muchos feligreses vinieron a confiar a ellas sus intenciones y sus problemas. En comunidad, ella era una buena compañera, no se irritaba, siempre discreta, sensible y disponible.
A pesar de esta terrible enfermedad que le consumía poco a poco, en el “otro mundo”, siempre se quedara con su bonita y acogida sonrisa.
Estamos muy agradecidas por su vida y especialmente su entrega total con sencillez y humildad que le hizo más cercana de todos.

Murió en la fiesta de la VISITACIÓN, ella que amó mucho a la Virgen María y trataba de ser un poco como ella en sus actitudes.
Su funeral fue en la Capilla de Sainte Foy el 3 de Junio. Muchos miembros de su familia fueron presentes en las exequias.

“Si hemos amado a nuestro prójimo con todo nuestro corazón y en toda verdad
Delante de Ti, Señor, tendremos paz en nuestro corazón.
Los que han amado ya han encontrado la vida eterna
Nada los puede separar del amor del Dios de la vida.”

Hna Marie-José de Préville, smsm
Provincial